miércoles, 3 de marzo de 2010

Chile:luego del saqueo a Supermercado Lider, etc, militares controlan Concepción, llegan alimentos para repartir .(Sismo 8.8 Escala Richter)



CONCEPCION, Chile (AP) - Más de 14.000 efectivos militares tomaron el control de las ciudades más afectadas por centenares de individuos dedicados al pillaje después del terremoto que asoló gran parte de Chile y dejó 796 muertos.

Pero la alcaldesa de Concepción, Jacqueline Van Rysselbergher, dijo que "la situación se calmó gracias a la organización de los vecinos, algunos incluso con armas".

Durante la noche del lunes unas 60 personas fueron detenidas por intentos de saqueos, uno con arma de fuego y dos con cuchillos.

Concepción, a unos 500 kilómetros al sur de la capital chilena, es una de las ciudades más cercanas al epicentro del terremoto del sábado y donde se han registrado más acciones de vandalismo y pillajes.

Ante la ola de saqueos, la presidenta Michelle Bachelet anunció el martes que se han desplegado 14.000 efectivos militares para controlar el orden público y advirtió que se aplicará "el máximo rigor de la ley" a quienes cometan delitos.

Señaló que el martes "deben quedar instalados todos los dispositivos de emergencia, los hospitales de campaña, la repartición de víveres esenciales, la entrega de raciones alimenticias". Comenzaron a ser distribuidas 320 toneladas de alimentos.

La Oficina Nacional de Emergencia informó el martes que el número de muertos por el terremoto y tsunami del sábado aumentó a 796 y que los afectados llegan a los dos millones de personas.

En alusión a algunas críticas por la demora en la ayuda y en el control de la seguridad pública, Bachelet afirmó que "nunca en la historia de Chile" había sufrido un terremoto de esta envergadura, no sólo por su intensidad, sino que también por las numerosas localidades que devastó, a lo largo de más de 700 kilómetros.

En Concepción, el cabo del ejercito Alejandro Casanova dijo a la AP que la gente les dio una bienvenida de héroes al llegar el lunes.

"Los pobladores estaban contentos con nosotros, nos aplaudían cuando llegamos", dijo Casanova, uno de los 14.000 efectivos del ejército y la Armada que comenzaron a llegar a la zona.

Una de las voluntarias del movimiento "Un techo para Chile", Camila Cisternas, se quejó por la tardanza en la entrega de ayuda. "No sé si las autoridades no saben, o si están amarradas de manos, deberían haberse venido antes".

Pese al largo toque de queda de 16 horas que impuso el jefe de plaza general Guillermo Martínez, hubo algunos intentos de saqueo en esta ciudad. "Retuvimos a algunos que querían saquear, se lo entregamos a carabineros (policías) agregó Casanova.

El mando militar informó que ha ampliado el periodo del toque de queda desde las 18.00 hasta el mediodía del día siguiente.

En cuanto se levantó el toque de queda de 16 horas el martes los automóviles y mucha gente a pie salió a las calles, pero el comercio sigue cerrado debido a que no hay servicio de agua y luz.

En la Plaza de Armas de Concepción, unas 30 personas participaban en una misa en la calle, en el frontis de la catedral que permanece cerrada debido a los daños sufridos por el sismo.

Al otro lado de la plaza se escucharon aplausos porque un policía llevaba detenida a una mujer que había robado ropas. "Perdóneme, yo no soy así", dijo la mujer mientras el agente la subía al autobús policial.

Jóvenes voluntarios de Concepción armaban paquetes de alimentos entregados por un supermercado, en acuerdo con las autoridades , con azúcar, té, arroz, harina, sal, aceite, leche, y pañales para bebés. Las bolsas de plásticos eran entregadas a los militares para su distribución.

Los habitantes de Dichato, un poblado costero cercano que fue devastado por el tsunami que siguió al terremoto, recibieron el martes unas 300 cajas con víveres y agua.

La televisión estatal mostró a una mujer que no identificó y que expresó "gracias a Dios ya tengo para comer", mientras cargaba en su hombro una caja que contiene agua, arroz, leche, tallarines, sopa y alimentos para niños.

Cuadrillas de bomberos comenzaron una operación rastrillo en busca de cadáveres que podrían estar aún bajo los escombros del destruido pueblo costero, mientras militares armados y en traje de camuflaje, vigilaban la distribución de los alimentos.

En el barrio de Salinas, en el puerto de Talcahuano, a unos 10 kilómetros al oeste, los vecinos se organizaron para defenderse ante eventuales nocturnos de ataques de saqueadores y en sus viviendas levantaron carteles blancos donde se leía "Yo cuido a mis vecinos".

Pedro Quiroz, un comerciante de 33 años, dijo que el domingo escucharon rumores de que grupos de individuos preparaban saqueos y se organizaron en turnos para cuidar sus casas de noche.

"Es la angustia que sentimos por la escasa protección, por la poca protección que tenemos del gobierno. Se ve presencia policial, pero muy poca. La gente no sabe realmente a que atenerse", expresó.

martes 2 de marzo, 6:08 PM
fuente: Associated Press-via www.yahoo.com.ar

No hay comentarios: