La perspectiva de una recesión económica en Europa viene de la mano de un aumento de los reflejos atávicos que se expresan en un aumento de las expresiones y manifestaciones de xenofobia y racismo, y el crecimiento, en algunos casos, de fuerzas de extrema derecha.
La escalada de episodios de xenofobia que se produjo últimamente en Italia tuvo como víctimas a inmigrantes albaneses, rumanos y africanos y motivó una fuerte y generalizada reacción.
El presidente italiano Giorgio Napolitano y el papa Benedicto XVI dedicaron, incluso, al tema una mención especial durante un encuentro celebrado en el Quirinal, en el que hicieron un llamamiento en defensa de los valores de la solidaridad y el respeto a la dignidad.
Otro indicador preocupante es el crecimiento de la extrema derecha en las recientes elecciones realizadas en Austria, con mensajes que vuelven a poner el acento en "la amenaza" de la inmigración, reivindican el nacionalismo étnico y rechazan la integración europea.
Estas expresiones reflejan una deterioro en el clima cívico, el miedo a la pérdida de ciertos estándares de vida y la falta de incentivos a la integración social que impacta más negativamente en algunos sectores.Hay que recordar que los momentos de crisis económica han sido caldo de cultivo para que se incuben manifestaciones de racismo e intolerancia, las cuales no deben ser subestimadas.
FUENTE: diario CLARIN- BUENOS AIRES- 10-OCTUBRE -2008
viernes, 10 de octubre de 2008
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