1. Libérate
de la gente negativa
Pasa tiempo con gente
inteligente, entusiasta y con ideas en común contigo. Las relaciones deben
ayudarte, no herirte. Rodéate de gente que refleje la persona que quieres
llegar a ser. Elige amigos que te enorgullezcan, que admires, que quieras y que
te respeten. Personas que hagan tu día más brillante simplemente por formar
parte de tu vida.
La vida es muy corta para pasar
tiempo con personas que absorben tu felicidad. Cuando te liberas de la gente
negativa, eres libre para ser tú mismo.
2. Deja
ir a aquellos que ya partieron
Es una dura verdad, pero hay
algunas personas que sólo tienen tiempo para ti, cuando les das algo que ellos
necesitan. Cuando ya no les sirves para ese propósito, se van. La buena noticia
es que si eres perseverante, eventualmente descartarás a esas personas de tu
vida dejando, en su lugar, a personas con quienes podrás contar. Si alguien se
aleja de ti, déjalo ir. Tu destino es, jamás tratar de retener a alguien que te
abandona. Eso no quiere decir que sean malas personas, significa que su
participación en tu vida concluyó.
3. Darle una oportunidad a la
gente que no conoces
Cuando miras a una persona, a
cualquiera, recuerda que cada uno tiene una historia. Cada persona ha pasado
por experiencias que los han marcado y hecho crecer. Cada cara que ves en la
calle, representa una historia que es tan atractiva y complicada como la tuya.
Si les das una oportunidad, te darás cuenta que cada uno tiene algo increíble
que ofrecer. Así que aprecia la posibilidad de abrirte a nuevas relaciones, así
como naturalmente dejas ir las que no resultaron. Confía en tu juicio.
Prepárate para aprender, prepárate para el desafío de conocer a alguien que
quizás cambie tu vida para siempre.
4.Muestra bondad y respeto a
todos
Trata a todos con bondad y
respeto, incluso a quienes son groseros contigo, no porque son agradables, sino
porque tú lo eres. No hay límites o clases que definan a un grupo de personas
que merezcan ser respetadas. Trata a todos con el mismo nivel de respeto que le
darías a tu abuelo, y el mismo nivel de paciencia que tendrías con tu hermanito
menor. La gente notará tu gentileza.
5.Acepta al resto tal como son
En la mayoría de los casos es
imposible hacerlos cambiar, y además es grosero intentarlo. Así que ahórrate
ese estrés sin sentido. En lugar de intentar cambiarlos, dales tu apoyo y
enséñales con ejemplos.
6. Alienta a los demás y
anímalos
Apreciar lo maravillosa que es
la gente que te rodea, te lleva a buenos caminos. Así que alégrate por quienes
progresan. Celebra sus victorias y agradece abiertamente sus bendiciones. Todo
se devuelve, tarde o temprano la gente a quien apoyaste comenzará a apoyarte
también.
7. Acepta tu imperfecta manera
de ser
Este mundo, a veces, te hace
tratar de darles en el gusto a todos. Encuentra el valor para seguir siendo tú
mismo. Cuando se burlen de ti por ser diferente, ríete de vuelta porque ellos
son iguales al resto. Pasa tiempo con aquellos que te hacen reír y menos tiempo
con aquellos que te sientes presionado a impresionar. No somos perfectos para
todos, sólo somos perfectos para un grupo de personas que realmente se toman el
tiempo de conocernos y amarnos por quienes somos.
8. Perdona y sigue adelante
No vivas la vida con odio en el
corazón. Terminarás haciéndote daño a ti mismo, más que a las personas que
odias. El perdón no es decir “Lo que hiciste está bien”. Lo que estás diciendo
es “No voy a dejar que lo que me hiciste arruine mi felicidad para siempre”.
Perdonar es la solución. No quiere decir que estés borrando el pasado u
olvidando. Más bien estás dejando el resentimiento y el dolor de lado, estás
aprendiendo del incidente.
9. Ten detalles cada día
A veces, esos “pequeños
detalles” ocupan la porción más grande del corazón. No puedes ser TODO para
todos, pero puedes ser TODO para unas cuantas personas.
10. Presta atención a quienes
son tus verdaderos amigos
A medida que crecemos, nos
damos cuenta que es preferible tener verdaderos amigos a tener muchos amigos.
Recuerda, la vida es parecida a una fiesta. Invitas a mucha gente, algunos se
van temprano, algunos se quedan toda la noche, algunos ríen contigo, otros se
ríen de ti y algunos llegan realmente tarde. Pero al final, cuando se acaba la
diversión, hay un grupo de invitados que se quedan ayudándote a limpiar el
desorden. Y muchas veces ni siquiera han sido ellos los responsables del
desorden. Estas personas son tus verdaderos amigos en la vida. Son ellos
quienes más importan.
11. Sé leal siempre
En el verdadero amor y la
verdadera amistad, no se trata de ser inseparables. Estas relaciones se
fundamentan en dos personas siendo sinceras la una con la otra, incluso cuando
están separadas. En una relación recuerda que la fidelidad no es una opción es
una prioridad. La lealtad es todo.
12. Mantén contacto fluido con
quienes se preocupan por ti
En las relaciones humanas la
distancia no se mide en metros, sino en afecto. Dos personas pueden estar una
junto a la otra, pero a metros de distancia. Así que no ignores a alguien que
se preocupa por ti, porque la falta de preocupación hiere más que los insultos.
Mantén el contacto con quienes se preocupan por ti. No porque sea conveniente,
sino porque ellos merecen un esfuerzo extra. Prestar atención a estas personas
es prioridad.
13. Cumple tus promesas y sé sincero
Si dices que vas a hacer algo
¡HAZLO! Si dices que vas a estar en algún lugar ¡HAZLO! Si dices que sientes
algo ¡SÉ REAL! Si no puedes entonces ¡NO MIENTAS! Siempre es mejor decir la
verdad de frente. No juegues con el corazón de las personas. No digas “verdades
a medias” esperando que confíen en ti cuando la verdad salga a flote; las
verdades a medias no son mejores que las mentiras. Recuerda, el amor y la
amistad no hacen daño. Engañar y mentir hace daño. No juegues con los
sentimientos de otros, porque no estás seguro de tus propios sentimientos. Sé
siempre abierto y honesto.
14. Da lo que quieres recibir
No esperes lo que no estás
dispuesto a dar. Comienza a poner en práctica esta regla de oro. Si quieres
amor, entrega amor. Si quieres amigos, sé amistoso. Si quieres dinero, aporta
un valor. Funciona, es muy simple.
15. Di lo que sientes
y siente lo que dices
Dale a las personas en tu vida
la información que necesitan, en vez de esperar que sepan lo que no saben. La
información es el lubricante que mantiene al motor de la comunicación
funcionando. Empieza a comunicarte claramente. No intentes leer la mente de
otras personas y no esperes que otros traten de leer la tuya. La mayoría de los
problemas empiezan con la mala comunicación.
16. Deja que otros tomen sus
propias decisions
No juzgues a otros por tu
propio pasado. Ellos viven una vida diferente a la tuya. Lo que puede ser bueno
para una persona, puede no ser bueno para otra. Lo que podría ser malo para una
persona podría cambiar la vida de otra persona para mejor. Deja que la genta
cometa sus propios errores y tome sus propias decisiones.
17. Habla menos y escucha
más
La gente no necesita un montón
de consejos, necesitan alguien que los escuche y algo de reforzamiento
positivo. Lo que quieren saber, frecuentemente esta dentro de ellos. Sólo
necesitan tiempo para pensar y continuar en ese viaje sin rumbo que
eventualmente los ayudará a encontrar su camino.
18. Deja los argumentos
mezquinos
Los demás no tienen que estar
equivocados par que tú estés en lo correcto. Hay muchas maneras de estar en lo
correcto.
19. Ignora los comentarios
hirientes y poco constructivos
Nadie tiene derecho a juzgarte.
No importa lo que hagas, siempre habrá alguien que piense diferente. Así que
concéntrate en hacer lo que tu corazón te diga que es correcto. Lo que la
mayoría de la gente diga o piense acerca de ti, no es tan importante. Lo que es
realmente importante es cómo te sientas contigo mismo.
20. Pon atención a la relación que tienes
contigo mismo
Una de las cosas más dolorosas
en la vida es perder tu esencia en el proceso de amar a otro demasiado,
olvidando que tú también eres especial. ¿Cuándo fue la última vez que “Alguien”
te dijo que te ama tal cual eres, y que lo que piensas y sientes es importante?
¿Cuándo fue la última vez que “alguien” te dijo que hiciste un buen trabajo o
te llevó a cierto lugar solamente porque sabía que eso te haría feliz? ¿Cuándo
fue la última vez que ese “Alguien” fuiste TÚ?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario